domingo, 30 de julio de 2006

Daños colaterales (Otro punto de vista)

Lo que sigue a continuación es uno de los muchos correos que me siguen llegando sin solución de continuidad. Parece ser que la norma en este blog es leer y luego hacer algún comentario a quien escribe pero NO publicar en los comentarios para que todos lo puedan leer y luego, obviamente si así lo desean discrepar o compartir dicho comentario. Decidí publicar este correo previa autorización de la autora. Quien lo escribe es Silvia, una amiga. Naturalmente, judía. Antes y creo que viene al caso, algo que escribió Jesús Quintero, (Hoy El Loco de la Colina, ayer El Perro Verde):
"Nunca seremos iguales, ni falta que hace.
No hay nada más aburrido que la igualdad.
Lo que hace falta es que nos respetemos y respetemos nuestras diferencias.
Que nos sintamos solidarios y unidos.
Que nadie explote a nadie.
Que nadie desprecie a nadie, lo avasalle o lo humille.
Que nadie se crea superior.
Que no seamos iguales no quiere decir que seamos mejores ni peores, sólo diferentes."

Esto es lo que escribió Silvia:
“...El tema es espinoso. No me atrevo a publicarte en la página, porque soy una catrasca en el ámbito informático y quizás lo sea en darte mi respuesta. Lo único que encuentro es que no la siento utópica. Más bien terrenal. Por lo que me atrevo a decir que realmente más allá de lo doloroso de un conflicto bélico, aunque suene extraño, la guerra puede ser una solución. Salvo que se esté de acuerdo con la máxima de poner la otra mejilla, o con al aceptación de nacer para ser cabra destinada al sacrificio.
El Hezbullah prendió fuerte en la población libanesa porque supo, en sus inicios, nacer como la resistencia frente a los franceses, instalados allí. En esas condiciones, las "resistencias" son siempre muy estimadas. Si no preguntale a los españoles de las valerosas resistencias que gestaron (y de paso, te deslizo que se estima que el 25% de sus integrantes, eran judíos, así como los desaparecidos más emblemáticos del terrorismo Sudamericano al que hacés buena referencia, como ser Bleier, o Kreimerman, o los que sobrevivieron como Rosencoff, y que el idisch era el idioma cuasi oficial de las primeras reuniones comunistas a las que supiste asistir, pero algunos añitos antes y miles de etc.).
Hezbullah decidió quedarse al amparo de esa protección que le brindaron los civiles (la cual ellos saben devolver en suculentos aportes, porque la guita llueve en los dos frentes), entreveraditos entre la gente, en un curioso pacto que provee protección de su población querida y muerte a la misma. De esa manera la guerra es entre ambas poblaciones. No hay un "frente" en donde los civiles queden afuera. A pesar de eso Israel, sobrevuela días antes la zona a bombardear, sacando avisos que así será para que los civiles evacuen la zona. No así Hezbullah. A eso se refiere Olmert con la cita "daños colaterales". Israel está siendo evacuada, al azar claro, porque no hay avisos para esa población. Y también tiene daños. En la guerra siempre se pierde. El tema que a veces es necesaria para revolucionar, y a veces lo es para sobrevivir, por extraño o contradictorio que parezca.
Esto es parte del mail de un Haiffense...
“...Gente: Aquí les escribo nuevamente desde Haifa, a la que llegue hoy a trabajar un poco y regar las plantas. Suba en el índice de adrenalina se me produjo a la mañana, ya que la alarma me tomo en las afueras de Haifa en campo abierto, no teniendo donde esconderme pero por suerte cayo en otro lado. Ayer cayeron varios cuetes en la zona que reventaron casas pero no personas. Cayo uno en el Zoo de las krayot pobres animales.! Los nenes lloran pero la vamos llevando. Destrozos de los que te imagines, más allá de la imposibilidad de vivir en nuestra ciudad...”
Silvia.

*Siguen fotos, para ampliarlas hacer click sobre ellas.


La tierna historia de George Bush y Bob...


George Bush va a un colegio de primaria para hablar sobre la guerra. Después de hablar, le dice a los niños que le pregunten lo que quieran.
Un niño levanta la mano y George le pregunta como se llama. “Bob”.
¿Y cual es tu pregunta, Bob?”
“Tengo 3 preguntas:
Primera: ¿Por qué EE.UU. invadió Irak sin el apoyo de la ONU?
Segunda: ¿Por qué es usted el presidente si Al Gore tuvo más votos?
Tercera: ¿Qué pasó con Osama Bin Laden?
Justo después de esto sonó la sirena del recreo.
George Bush le dijo a los niños que continuarían después del recreo. Luego del recreo, continuó el turno de preguntas. ¿Alguien quiere preguntarme algo?
Un niño diferente levantó su mano. Bush lo señaló y le preguntó como se llamaba.
“Steve” Y cual es tu pregunta, Steve?
Tengo 5 preguntas:
Primero: ¿por qué EEUU invadió Iraq sin el apoyo de la ONU?
Segunda: ¿por qué es usted el presidente si Al Gore tuvo más votos?
Tercera: ¿qué pasó con Osama Bin Laden?
Cuarta: ¿por qué la sirena del recreo sonó 20 minutos antes?
Y quinta:, ¿dónde está Bob?

*Esta joya me la envió Gaby y me pareció que valía la pena compartirla.

jueves, 27 de julio de 2006

Daños colaterales...

Hoy, después de varios intentos puedo volver a escribir nuevamente. Hace ya unos cuantos días que colgué el video de Jesús y ya no pude seguir. Cuando comenzaron los primeros bombardeos israelíes a Palestina sentí náuseas. Ver las imágenes del telediario, donde nos mostraban toda la barbarie llevada a cabo en nombre de esta absurda guerra contra el “terrorismo”. De eso, sabemos bien nosotros, los habitantes de Sudamérica, que no hay peor terrorismo que el terrorismo de estado. Y esto se multiplica si el que lo practica, tiene uno de los mayores ejércitos del mundo. Cuando uno creía que ya nada podría sorprenderle... esas imágenes de impunidad, odio y destrucción hacen que por estos días, mi fe en el ser humano se convierta en asco. La misma noche en que comenzaron los bombardeos sobre la población civil del Líbano, el asco que sentía se iba transformando lentamente en rabia e impotencia. Confieso que me sentaba frente al ordenador y no podía escribir ni siquiera una palabra. Pero esta noche quiero ser políticamente incorrecto, así que no pienso entrar en largas teorizaciones acerca del conflicto entre árabes y judíos. Simplemente porque no creo en los movimientos políticos fundamentados en religiones. Hoy vi imágenes donde un clérigo musulmán llamaba a la guerra santa, pero también vi a varios rabinos y judíos ortodoxos rezar y bendecir las bombas que minutos después la aviación israelí lanzaría sobre Beirut. Las cifras de muertos de uno y otro lado crecen hora a hora. La mitad de ellos son niños menores de 15 años... Anoche una familia libanesa fue asesinada en su apartamento por un tanque israelí, pero también ayer, dos niños israelíes murieron asesinados por un misil lanzado por Hisbolah... A todo esto, que dirá el Santo Padre que vive en Roma? Silencio... Y la ONU? Porque recuerdo bien que cuando Bush quería invadir a toda costa Irak en busca de las armas de destrucción masiva (alguien se acuerda de esto?) el secretario general, Koffi Anan bien que se apuró a convocar una sesión urgente para apoyar a los EE.UU. Hoy cayeron asesinados por un misil teledirigido por Israel, cuatro observadores de la ONU... Tengo claro que si el misil en vez de ser disparado por Israel hubiera sido lanzado por Siria o Irán... bueno bueno... A todo esto, que dice el gobierno de Israel acerca de la masacre contra el pueblo libanés? Su primer ministro, Ehud Olmert calificó a las víctimas civiles libanesas como asuntos colaterales en la guerra llevada a cabo por su gobierno para terminar con la pesadilla terrorista de Hezbolah. Así que más de 150 niños asesinados por las bombas israelíes son daños colaterales... Sin solución a la vista, decía al comienzo que estos son días de victoria para los señores de la guerra, los amos del mundo. Pero lo que ellos no saben, y esa es nuestra mayor arma, es que detrás de ellos, hay un enorme ejército de gente... allí estamos los estafados, los olvidados, los imbéciles, los explotados, los locos, los utópicos, los perseguidos, en fin... que estamos nosotros. Al menos yo, esta noche necesito seguir creyendo en eso.



*Fotos Diario ADN Madrid (www.diarioadn.com)

miércoles, 12 de julio de 2006

De naufragios y otras navegaciones

Te propongo que no haya despedidas. Mi alma no soportaría una sola despedida más. Y yo la entiendo a ella, a mi alma. Los dos estamos hartos de tanta despedida, de tanta partida inútil. La puta che... Será esa mezcla de tristeza y lejanía que sabemos se nos vendrá encima... quizás por eso no queremos más despedidas. Como una llovizna gris que cae por ejemplo sobre una estación de trenes abandonada, una tarde de invierno... ella no sabe de su pena. La llovizna simplemente se deja caer sobre los techos herrumbrados. Así estamos mi alma y yo. Heridos por esa despedida que no queremos... que no aceptamos, que nos lastima. Dejándonos mojar. Mojándonos... Escucho por un instante el silencio. Y descubro que no hay solo silencio en el mismo silencio. Son los silencios del alma. Miro hacia atrás y solo veo a mis fantasmas arrastrando sus pesadas cadenas. Porque al dolor, también uno se termina acostumbrando. Todos estos años, quise ser el invasor de tus playas, desembarcar en ellas y pelear contra tus miedos, tus culpas, pero también buscarte... encontrarte y celebrarte. Darte un trago de lo mejor y lo peor que de mi vida tengo. Como bien decís, juntos vivimos los mejores pero también los peores momentos. Me viste venir desde la costa de tu alma. Te convertiste en un faro iluminando mi horizonte, trataste de mostrarme cómo se hacía para llegar hasta vos... Puse mi barco en dirección a tu puerto. Me hacías señas desde tu playa... pero hoy, justamente hoy...no pude hacerlo. La bravura de tu mar y mis tormentas me impidieron llegar a vos. Luché todo lo que pude... pero con la naturaleza no se juega. Ni vos podés calmar tu oleaje ni yo puedo amainar mis tormentas. Quedé tan cansado, que desde ese día, mi alma y yo necesitamos un puerto donde protegernos.... donde repararnos, donde curarnos... para intentarlo una y otra vez hasta que finalmente pueda llegar otra vez a tu orilla. Tengo tanto miedo! Encuentro todos tus puertos cerrados. No sé cuanto tiempo más pueda navegar sobre tus mares. Para mejor... el pronóstico del tiempo no ayuda nada. Dicen que tus vientos soplarán y soplarán y mis tormentas... parece que se prolongarán por varios días y noches. Cuántas? No lo sé. Otros barcos buscan también tu puerto. Si algún día sucede que uno de ellos logra llegar hasta vos, en ese mismo instante pondré proa a otro destino. No es un reproche, es un juramento. Porque como dice el viejo Pablo... “si poco a poco dejás de quererme, yo también dejaré de quererte poco a poco”. Si de pronto me olvidás, entonces no me busques, porque yo también habré empezado a olvidarte. Pero si desde mi partida, cada día que pase, sentís nuestra ausencia, si con mi recuerdo tu nariz huele a tabaco y humo, a sudor y sábanas mojadas, pensá que en ese mismo instante yo estaré oliendo a jazmines, a jardines recién regados y a noches de verano. Porque tu fuego aún no se me apagó. Voy a conservar esta llamita encendida todo lo que pueda. Pero si me voy, cuando tu recuerdo y tu seguridad me duelan y mucho, en ese instante la tendré que apagar. Y esa noche, en la oscuridad de mi alma, estoy seguro que vendrán mis fantasmas a encenderme otro fuego. Ellos no fallan, siempre están a mi lado. Mis viejos fantasmas. Los buenos, los burlones, los malos, los locos, los suicidas. Entonces, si lo que necesitás es que me vaya, me voy... si lo querés, así lo querré yo. No más de lo mismo, carajo. Hoy sé que quiero volver a enamorarme, pero no de tu hermosura, de tu frescura, de eso... siempre lo estuve. Ya lo intentamos tantas veces, pero no... hoy quiero enamorarme de todo lo malo que hay en vos, de tus tristezas, de tu infancia, de tus ríos internos que no saben de salidas al mar. Porque te quiero entera, es que quiero amarte enteramente. Me voy... un buen capitán debe saber qué hacer en medio de las tormentas, por ejemplo conocer las limitaciones de su propio barco. No quiero más naufragios. Mi tripulación... mis fantasmas, están cansados de flotar a la deriva durante meses y meses. Ellos dicen, porque los escuché, que no soy un buen lobo de mar. Pero esta vez los asumo a todos ellos, los quiero salvar, llevarlos a puerto seguro. No soportaría escucharlos otra vez arrastrar sus cadenas. Porque los quiero libres. Te dije que no quería más despedidas. Me voy y te veo una vez más allí... parada junto al mar, saludándome con un pañuelo azul en la mano. Es una buena señal, siempre me gustó el azul y vos lo sabés. Me gritás quien sabe qué cosa, tus olas son enormes y ya no puedo escucharte. Pongo rumbo mar adentro, izo mis velas, las que alguna vez fueron de colores, hoy son inmensamente grises. Alguien pintó en ellas: Busco puerto. Allá voy. Mi amor, mi cómplice, mi compañera... mi amada inmortal, ayer te quise tanto como pude, hoy quiero amarte tanto como no pueda. Sin despedidas... vos lo sabés... te amo. Hasta siempre.

martes, 11 de julio de 2006

SUDAMERICA



AL GATO UTOPICO Y LA BANDA DE DENIA
LOS URUGUAYOS EN LANZAROTE
PITINGO CHICO


SUDAMERICA

Nadie la para ya.
No pueden detenerla,
ni la calumnia, ni el boicot, ni el odio.
Subyace en la conciencia de los pueblos,
que la tierra jamás fue despojada.
Este es un continente de aventura,
que a los aventureros se los traga.
Les sube despacito por la sombra,
y el ojo codicioso les socava.
Vendrán los desahuciados de la tierra,
buscando sus riquezas legendarias,
hasta que un día, en una misma greda,
se confundan las lenguas y las razas.
América, animal de leche verde,
por la gran Cordillera vertebrada,
hunde el hocico austral bajo del Polo,
y descansa en su fuerza proletaria.
Sube por la luz, lenta y segura,
con el polen del sol en sus entrañas,
y su destino torrencial,
fijado está en el tiempo por la Vía Láctea.
El hambre, la violencia, la injusticia,
la voluntad del pueblo traicionada,
no harán sino, aumentar su rebeldía,
no harán sino, apurar en sus entrañas,
el hijo de la luz, que viene a unirnos,
en una misma espiga esperanzada.
Porque, América del Sur, tierra del futuro,
igual que la mujer, ¡ vence de echada !

Jorge Cafrune
Sunchal, Jujuy, Argentina
(1937-1978)

sábado, 8 de julio de 2006

Dama de Gris

Hoy tengo ganas de recorrerte. Es uno de esos días en los que la nostalgia se levanta antes que nosotros y cuando vas a cepillarte los dientes aún con la somnolencia del recién levantado, te mirás al espejo y sucede lo inevitable... La ves a ella, a la nostalgia. Está parada a tu lado, entonces te das cuenta de que no vas a tener un día fácil. Arrancás temprano, con ella al costado, eso sí... como buena mujer que es (y para peor... ella lo sabe), utiliza todas sus artes para que no la ignores. Te conquista, te seduce, te enamora. Lo malo no es eso... lo malo es que uno la deja hacer. Ahí es cuando nos gana para todo el día. Y te dije que hoy, justamente hoy... era uno de esos días. Así que me pongo a Piazzolla y me abandono a la nostalgia y los sentimientos. Por hoy, que sean ellos los que me lleven a este viaje diario por los recuerdos. Empiezo a olerte, a caminarte por donde más te duele. Allá por Aparicio Saravia ó el Borro... cómo no te va a doler tanta miseria? Cómo no sentirte lastimada cuando ves chiquitos descalzos, con los mocos cayendo como si fueran su documento de pobres. Si hasta parece que los llevaran con orgullo... y está bien, ellos saben que cuando los vemos con sus caritas llenas de mocos, nos hacen sentir mal, tanto a vos como a mí nos hacen daño. Sigo caminando y llego a 18 de Julio... decime... habrá notado la avenida mi ausencia de todos estos años? Yo quiero... necesito creer que sí, que los faroles y los bancos de la Plaza Independencia me extrañan, que las yiras... un día cualquiera le preguntaron a algún cuidacoches o a Carlitos el lustrabotas, por ese tipo de barba y traje siempre tan bien perfumado que nos saluda cuando pasa y que hace ya cinco años que no lo vemos. Me imagino y doy por descontado, que los mozos de todos los bares, boliches o como quieras llamarlos se tomaron una copa a mi salud cuando el avión estaba levantando vuelo desde Carrasco. De lo que sí estoy seguro es que en la peluquería me extrañan...claro... eso me lo dice el Gaby cada vez que hablamos por teléfono. Como verás, estoy tratando de no caminar por Malvín... pero sabés por qué? Si vos lo sabés mejor que yo... porque su recuerdo me lastima y mucho. Cuando pienso en Malvín no sólo lo camino, lo recuerdo y lo siento, sino que también lo huelo. El olor de los jardines recién regados, o a chorizo a las brasas del tablado del club en las noches de carnaval. El perfume y el color de los jacarandás y paraísos en flor después de una tormenta de verano. Y cuando bajás por Missouri... al cruzar Orinoco, empezás a ver como está la playa hoy...a ver... hay muchas olas o sea que está muy honda... no me quejo, cualquiera sabe que cuando Playa Honda está así, esos son los mejores baños que te podés dar! Te estaba contando que al llegar a Orinoco no solo veías como estaba el mar sino que también te envolvía una brisa marina como la que solamente Malvín te puede regalar. Si será peligrosa la nostalgia que yo no quería... pero ya estoy caminando por Malvín... Mirá que es hija de puta... la nostalgia, digo. Pero uno la quiere, quizás, y te lo repito...porque estoy convencido de que es mujer y a una mujer se la quiere y chau... qué se puede hacer con una mujer que permanentemente te seduce, más que terminar amándola? Quizás una noche de nostalgia colectiva, que sé yo... de borrachera cósmica, de locura generalizada o de sentimientos colectivos, allá en la rambla de Malvín se junten el Vampi, el Pope, el Gaby, el Flaco y Carlitos con la guitarra y cuando empiece a sonar el primer acorde, yo... desde aquí me sienta tan cercano a ellos que hasta podamos abrazarnos. Después... después tendríamos tanto para contarnos... porque como dijo Neruda... nosotros los de entonces, ya no somos los mismos. Ni nosotros ni vos podemos serlo. Hoy, no somos más que este montoncito de cosas que pudimos guardar dentro de cada uno de nosotros, tratando de conservarlas vivas después de tanto daño y desengaño, después de tanta partida inútil y de tanta ausencia. Llegará el día en que nuevamente, como dice también el Flaco, vagaré por tus anchas veredas hasta hacerte sentir otra vez enteramente mía. Porque vos y yo lo sabemos... me hiciste sentir tan feliz cuando me regalabas tus mejores estrellas, pude llorar contigo mis tangueces así como ofrendar a tu luna, en un ritual de amor... a mi primer hijo... y yo te sentí tan triste algunas veces mientras mirabas el mar como una dama vestida de gris...te amé tanto como se te debe amar, recorrí íntegras tus partes húmedas después de la lluvia como lo hacen los que inventan el amor todos los días, te vi despertar desnuda... amanecida... después de una noche de pasión. Por eso amo tanto a la nostalgia, porque sin ella no podría llegar a vos a través de la distancia y del tiempo. Pero todo...todo eso, es posible... porque una vez, vos y yo... vieja Montevideo... seguramente en una noche de verano... nos juramos amor eterno. Te deseo y te quiero tanto...

jueves, 6 de julio de 2006

Luz de Vida


Luz Ibarburu

"...El viernes 30 de junio de 2006 falleció Luz Ibarburu, a los 84 años. Fue fundadora de la organización Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos y Desaparecidos. Era la madre de Juan Pablo Recagno, fundador del Partido por la Victoria del Pueblo, detenido desaparecido en 1976 en Buenos Aires..."

Ahora, todos somos guachos... se nos fue Luz, así como antes se nos fue la querida Tota Quinteros. Y no pudo ser... no pudo encontrar los restos de su hijo Juan Pablo, desaparecido por los asesinos Gavazzo y Cía. Luz fue también la madre de todos nosotros, los de la “Generación del Silencio”. Personalmente la conocí en una de las reuniones que organizaban las Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos y Desaparecidos en el local de AFCASMU. Recuerdo que llegué bastante antes de la hora de comienzo y fue justamente ella quien me recibió. Charlamos largamente acerca de los desaparecidos y de la búsqueda incesante que llevaban a cabo las familias. Si bien tenían el apoyo moral y ético de todos nosotros, ella me contó acerca de lo solas que se sentían en muchos momentos. Luz era una mujer cálida, serena, digna y en su rostro de dolor aún quedaban huellas de lo bonita que fue siempre. Para terminar, recuerdo que con toda la ingenuidad de mis 20 años a cuestas, le pregunté como se animaba a hablar conmigo, sino pensaba que yo podía ser un “tira” y Luz me respondió... “no te preocupes... yo se con quien hablo, después de todo sigo siendo Madre...” Luego nos volvimos a ver varias veces, ya sea en alguna reunión de la Multisectorial, algún acto del Pit-CNT o algún viernes en Plaza Libertad. Paradojas de la vida, si bien Luz no pudo encontrar a su hijo antes de morir, en cambio si pudo ver a su asesino, el coronel José “Nino” Gavazzo en la cárcel. Querida y admirada Luz, gracias por tu ejemplo de vida y de lucha. Desde Denia un beso enorme. Gabriel.-


*Entrevista a Luz Ibarburu en Guambia el 24/12/2005:
http://www.pvp.org.uy/luz-ibarburu.htm

domingo, 2 de julio de 2006

A 33 años del golpe de estado

“...Vamos, a caminar... que la noche será larga y oscura y las estrellas no quisieron venir a esta orgía de sangre y luto que la luna se fue con las compañeras, para paliar su dolor y acunar a sus hijos recién nacidos. Aunque andemos dando tumbos, es necesario caminar porque ese será nuestro signo, el caminar eterno pero sin Moisés... Seremos entonces nosotros, los hasta ayer niños, los que mostremos el camino porque los viejos no están, entonces seremos nosotros... aunque no haya caminos, entonces los haremos nosotros...”

Qué inconscientes fuimos! El solo hecho de pensar las cosas que hicimos me acelera el pulso... pero lo hicimos. Esta generación, a la que llamaron “la del silencio” se la jugó. En 1980 cuando la dictadura quiso aprobar una constitución que hubiera dejado muerto de envidia al mismo Mussolini, fuimos nosotros los protagonistas del NO. Cuando hubo que refundar los sindicatos obreros y estudiantiles, también fue nuestra generación la que levantó las viejas banderas. Muchos compañeros de aquella resistencia juvenil, hoy son diputados y hasta algún senador anda por ahí, pero también otros cayeron por aquellos días. Hasta el final de la dictadura no les dimos tregua a los fascistas. Allá por el ‘83, cuando ya se veía la luz al final del túnel, las paredes del cuartel de La Paloma del Cerro, se llenaron de la sangre de jóvenes compañeros cuyo único delito era pertenecer a los sindicatos estudiantiles (la gloriosa ASCEEP-FEU), o distribuir un volante del PIT-CNT llamando a un paro cívico. Claro... los milicos cuando escuchaban la palabra cívico, como no la conocían... se llevaban la mano al revólver. Y entonces meta picana en los genitales, y dale que te dale con el submarino, ó simplemente como le pasó a una compañera en el FUSNA, donde la violaron más de 20 fusileros navales en una sola noche frente a su marido y su suegro. Pienso hoy, dónde estarán esos más de 20 héroes? Quizás caminen libremente por 18 de Julio y estoy seguro que varios de ellos habrán sido ascendidos por los “servicios a la Patria”. Luego, con la llegada de la democracia, se abrieron las cárceles. Las internas y las externas. Llegaron ó salieron los viejos dirigentes políticos y sindicales. A muchos de nosotros, a los de aquella generación, se nos corrió para el costado. No pretendo aquí hacer una crítica a esto último. Hoy, lo que quiero, a más de 30 años del golpe de estado, es recordar a todos aquellos compañeros que se jugaron por entero. A los que tuvieron que pasarse a la clandestinidad, a los que pasaban un simple volante ó pintaban un muro, a los que nos tragábamos el miedo y le dábamos para adelante. A la “Generación del Silencio”... Salud!!!